¿Cuáles son los consejos para realizar una buena rutina de #skincare?






1. Mantener el hábito 

Independiente de la edad que tengas, de tu historial en relación al cuidado de la piel o de qué tan constante seas para utilizar productos:  cuidar la piel se puede convertir en un hábito. Todo es cuestión de persistencia. Una vez que empieces a cuidar tu piel y vayas notando los cambios, te costará cada vez menos transformarlo en una rutina diaria. Te aseguro que se transformará en un ritual sagrado, que cuando no lo hagas te hará sentir culpable porque no le dedicaste el tiempo para vos y tu piel.

2. Crear un espacio

Diseñar y confeccionar un espacio donde tengas los productos para realizar el cuidado de tu piel. Cuando estabas en el colegio seguro oíste alguna vez que para estudiar de forma correcta debes crear "hábitos de estudio en espacios adecuados". Esto del cuidado de la piel es similar. Tener tus productos ordenados, limpios y en un lugar específico te hará más fácil crear el hábito de la rutina de belleza. 

3. Hacete un tiempo para vos y crea un momento de spa

Converti tu rutina en TU MOMENTO. Nunca está de más regalarnos un momento sólo para nosotros mismos, para nuestro bienestar personal y mental.

¿Te ha pasado que cuando vas de visita a un spa, éste es un ambiente confortable y cargado de armonía? Quizás podrías poner la música que te gusta y te relaja, podrías poner en silencio tu teléfono o sentir ese aroma de aceite esencial que tanto te gusta.

La idea es mantener un ambiente ameno y cargado de positivismo para aportar un poco de tranquilidad y confort a tu vida mientras cuidas tu piel.

4. Establecer recordatorios

Si tienes un día cargado de reuniones o muchas actividades, mantener en agenda la sesión de cuidado de la piel es un auto-compromiso. Por ello, puede ser de mucha ayuda, agendarlo en el celular a la hora!

5. Ser consecuente

La rutina de cuidado de la piel no solo es aplicable en dos sesiones diarias. La idea es que en tu día a día puedas extenderla más allá de la rutina am y pm. No olvides reaplicar brumas hidratantes y nutritivas si trabajas en espacios donde horas se utiliza mucho el aire acondicionado o la calefacción, limpiar tu rostro luego de largos trabajos con mascarillas, beber suficiente cantidad de agua purificada, alimentarte de la forma más saludable posible, etc, etc.


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